Las islas Robinson Crusoe y su tesoro.

El archipiélago es un conjunto de varias islas llamadas archipiélago Robinson Crusoe, pero quizás debió haberse llamado el archipiélago de la isla del tesoro. Lo componen las islas Robinson Crusoe, antiguamente conocida como la isla Más a Tierra, Alejandro Selkirk la isla de Más Afuera, el islote Santa Clara y otros islotes menores. También conocida como la isla de Juan Fernández, fue el hogar del marinero escocés Alexander Selkirk, que vivió durante 4 años en la isla y fue inmortalizado por Daniel Defoe como Robinson Crusoe. Alexander Selkirk fue abandonado en la isla y vivió solo durante cuatro años y cuatro meses antes de ser rescatado. Sus hazañas han llamado la atención en todo el mundo debido a la novela   "Es el libro más traducido después de la Biblia, según Reader Digest".

Pintura de Howard Pyle, 1911

Una larga búsqueda de un botín de la época colonial española parece estar culminando en Chile con el anuncio por parte de un grupo de aventureros que dicen haber encontrado alrededor de 600 barriles con monedas de oro y joyas incas lo que equivaldría a 10 mil millones de dólares, en esta isla del Pacífico.

"El tesoro más grande en la historia ha sido localizado," Dijo la empresa de seguridad Wagner, por intermedio de su abogado  y propietaria del artefacto, robot  georadar TR araña, bautizado como Arturito. Pero cuando el gobierno de Chile por medio de su Intendente quiso coordinar la extracción de tesoro, se pudo comprobar que el georadar no era confiable y el proyecto se dilató hasta quedar en nada. ¿Fue verdad o mentira?

De ser cierto el tesoro contendría entre otras cosas, doce anillos papales, la Llave del Muro de las Lamentaciones, una de las joyas más famosas de la historia, conocida como la Rosa de los Vientos, e incluso se cuenta que también habría parte de los tesoros del Imperio inca como también allí estaría enterrado el collar de la mujer de Atahualpa

El anuncio provocó reclamos de propiedad, estos buscadores de tesoros reclamaron la mitad del botín y dijeron que iban a hacer donaciones a organizaciones sin ánimo de lucro. Todo fue invento de alguien, para qué? Es lo que nunca se supo.

También dio lugar a especulaciones sobre el contenido de lo que se consideraba como uno de los grandes tesoros perdidos desde el saqueo español a América del Sur. Diarios chilenos especulaban y estaban llenos de informes, por ejemplo; que el tesoro incluía 10 anillos papales y estatuas de oro originales del imperio Inca.

Lo que si es cierto es que un tesoro fue enterrado ahí  y durante siglos, los cazadores de tesoros han rastreado la isla en busca de un botín que según los informes, fue enterrado allí entre 1714 y 1715 por el navegante español Juan Esteban Ubilla y Echeverría, almirante de la flota que permanecía en Veracruz, México. La historia indica que Ubilla, posterior al zarpe desde México, con el tesoro azteca a bordo, desapareció por más de un año y medio y recién en 1715 optó por retornar a España. Los archivos encontrados indican que Ubilla habría escondido el tesoro en la Isla Róbinson Crusoe, porque en esos tiempos, entre 1700 y 1715, se libraba la Guerra de Sucesión Española, y se habría visto involucrado en una conspiración contra los Borbones, donde un sector de la nobleza procuraba quitarle sus riquezas en beneficio de los Habsburgos.

 La historia demuestra que dos tercios de todas las riquezas americanas, desde 1700 a 1712, terminaron en las arcas de los borbones, en Francia. Se dice que Ubilla tomó contactos secretos con los británicos, quienes, posteriormente, vinieron a la isla a rescatar el tesoro. En ese lapso, ingleses y franceses (borbones) se encontraban en paz, lo que da verosimilitud al “contacto inglés”.

A mediados del Siglo XVIII a bordo de la nave “Unicorn”, arribó el capitán Cornelius Webb al archipiélago para rescatar el tesoro de Ubilla y Echeverría, mandado por el almirante británico Lord George Anson (En 1761). En esta expedición el marino inglés Webb, logró desenterrarlo, pero cuando pretendía regresar a Inglaterra, lo sorprendió una tormenta que quebró el mástil del “Unicorn”, debiendo regresar a la isla donde nuevamente ocultó el fabuloso cargamento.

Webb navegó y llegó a Valparaíso como pudo, con la intención de reparar el navío y así cumplir su misión. Sin embargo, el capitán inglés descubre planes de amotinamiento en la tripulación, y advirtió que cuando volviera a la isla lo matarían y se apoderarían del tesoro. Entonces, optó por quemar la nave con toda su tripulación y volvió a las costas de Valparaíso en un bote a remo, como único sobreviviente del naufragio.

Desde Valparaíso, envió dos cartas a Gran Bretaña, a Lord George Anson, contándole lo sucedido e indicándole en forma codificada el lugar donde había re-enterrado el tesoro. Dicho mensaje nunca llegó a manos de Anson ya que éste murió cinco meses antes del arribo del mensaje enviado por Webb.

Y las historias siguen, y así muchos otros buscadores se han involucrado en esta aventura sin lograr nada. El tesoro sigue estando ahí!

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